Hace pocos días publicamos en nuestras redes un video cuyo objetivo era visibilizar la problemática de la Contaminación del Aire en Tucumán a la vez que concientizar a la ciudadanía respecto al concepto más práctico que podemos tratar de transmitir como ONG: LOS TUCUMANOS TENEMOS QUE DEJAR DE QUEMAR, como enseña el Dr. Rodrigo Gibilisco, Investigador del Conicet y representante de la Iniciativa Breathe2Change en Tucumán.
Desde Meta Tucumán, con nuestro escaso presupuesto, promocionamos el video para que apareciera en los celulares de muchos tucumanos: Unas cuarenta mil (40.000) personas lo reprodujeron, y unas 8.000 lo vieron en su totalidad.
Parece muy poco para una provincia con casi dos millones de habitantes. Mucho si se tienen en cuenta que en la promoción de ese video invertimos sólo ocho mil pesos ($8.000).
En Meta nos apasiona leer los comentarios que los ciudadanos hacen a nuestras publicaciones. Nos permite tomar un conocimiento diferente al de nuestra percepción pre formada sobre distintos temas y entender cómo pensamos los tucumanos.
Los comentarios de este video variaban entre reclamos personales por alergias, falta de oxígeno, olores nauseabundos, o relatos sobre la pesadilla de convivir con el hollín cerca de los ingenios en Concepción o Banda del Río Sal. También reclamaban educación y concientización, evidenciaban la ausencia total de controles por parte del Estado Provincial, mencionaban la inexistencia de sanciones para los responsables y señalaban la falta de voluntad política para afrontar uno de los más graves problemas que tenemos los tucumanos.
Ayer, en el día mundial del aire limpio, veíamos desde el parque 9 de julio las columnas de humo de cinco focos distintos de incendios de cañaverales cercanos a la capital, mientras nos acercábamos a participar de la Consulta Popular por el clima que el Ministerio de Salud de la Provincia llevaba adelante en el hotel Sheraton con participación de la Organización Mundial de la Salud, invitados por la iniciativa @breath2change.
Queremos compartir con ustedes varias conclusiones a las que arribamos desde Meta Tucumán tras este evento:
1.- Creemos que el lugar de la Secretaría de Medio Ambiente debería ser el Ministerio de Salud de la Provincia y no el Ministerio de Producción, por incompatibilidades obvias, y por cuanto las consecuencias perjudiciales del daño al ambiente terminan impactando en el sistema de salud provincial, como lo dan cuenta numerosos estudios (“Quema de caña y consultas por enfermedades respiratorias y oculares en menores de 15 años en la provincia de Tucumán”, Jordán AM, Dirección de Epidemiología, Tucumán).
2.- En Tucumán tenemos aproximadamente 265.000 hectáreas con producción de caña y 15 Ingenios Azucareros. Es imposible controlar esta producción con 5 (CINCO) personas asignadas a la fiscalización. Reiteramos: Sólo cinco (5) recursos humanos de una planta total de empleados públicos que supera las ciento veinte mil (120.000) personas, están asignados a fiscalizar la labor de los ingenios y la quema de caña en la provincia. La situación es más grave aun cuando se considera que esos fiscalizadores además deben controlar efluentes, citrícolas, contaminación en ríos, etc.
La Secretaría de Medio Ambiente necesita más recursos y más equipamiento de control. Solicitamos voluntad política para la resolución del problema.
3.- Necesitamos DATOS. En ese orden de ideas celebramos la iniciativa Breath2Change que impulsa dos laboratorios de monitoreo de calidad del aire en la provincia a través de una red de 40 dispositivos de medición provistos por fondeo internacional. Pronto esos datos serán examinados, procesados y distribuidos públicamente para que todos los tucumanos podamos saber qué estamos respirando y cuáles son los daños que nos ocasiona.
4.- La forma que tienen todos los Estados serios del mundo para administrar objetivos de control es, en primer lugar, REDUCIRLOS. ¿Y cómo se los reduce? La respuesta es muy sencilla: Con inversión en Educación. La concientización en el caso, permite sacar del objeto de control a todos aquellos ciudadanos que queman basura y campos POR IGNORANCIA.
No percibimos como ciudadanos la existencia de un plan de concientización masivo desde el enorme presupuesto de Publicidad y Propaganda (de unos cinco mil millones de pesos) destinado a Informar, Educar y Concientizar sobre los peligros de Quemar Caña y Basura. Creemos fundamental destinar una parte importante de ese dinero a estas campañas, en detrimento de miles de carteles autorreferenciales que obran en todas las esquinas señalando obras que se harán, o spots de radio que incesantemente relatan que se entregaron, por ejemplo, maquinarias para municipios. Los estudios científicos explican que una campaña de concientización efectiva permite mitigar el comportamiento ilícito en aproximadamente un 30%.
5.- Sin control es imposible que exista sanción. Insistimos que la tríada Educación, Control y Sanción aplica a todas las políticas públicas que repercuten en seres humanos. Por más inversión en Educación y Concientización, un grupo grande de personas continuarán quemando caña y basura en detrimento de la salud de millones de tucumanos simplemente porque les resulta conveniente desde el punto de vista económico y porque no les interesan los demás.
A esos infractores debemos SANCIONARLOS. No hay norma sin sanción, y desde luego sin control.
Si solo 5 fiscalizadores son los que elaboran las actas de infracción, poca posibilidad de sancionar tiene el estado provincial. La única forma de desvirtuar una acción guiada por eventual provecho económico es convertirlo en algo antieconómico y eso es lo que se logra a partir de las multas.
Estamos en 2022, son muchísimas las alternativas en equipamiento tecnológico con las que puede nutrirse a la Secretaría de Medio Ambiente para que realice un control exhaustivo.
En síntesis, consideramos URGENTE:
– Destinar inversión en concientización para reducir el objetivo de control. Esto es lo más sencillo, simplemente debemos asignar parte de los fondos previstos para Publicidad y Propaganda en campañas masivas en televisión, cartelería pública, radio y redes sociales.
– Transferir recursos humanos de otros sectores a la Secretaría de Medio Ambiente, en especial a fiscalización. Sin control no hay sanción, y sin sanción es como si la Ley nunca hubiera sido escrita. Durante la zafra deberían además reforzarse con otros recursos de fiscalización que apoyen a la Secretaría.
– Dotar de equipamiento tecnológico a la Secretaría de Medio Ambiente.
– Revisar y corregir el procedimiento posterior a la imposición de la Multa, de forma tal que las notificaciones a los titulares de los fundos sean automáticas, y las ejecuciones y sanciones económicas cumplan los requisitos de inmediatez, proporcionalidad y cobro esenciales para una sanción.
Necesitamos voluntad política para dar solución a un problema que afecta a todos los tucumanos, especialmente a los niños, y que lleva décadas, al igual que tantos otros, guardado en el cajón de los problemas que no queremos ver y a los que ingenuamente pensamos podemos acostumbrarnos sin consecuencias.
- Mientras intentábamos subir esta nota a nuestras redes se produjo un corte de luz masivo que afectó San Miguel de Tucumán y Yerba Buena. La causa: La destrucción de un tendido eléctrico de la estación El Bracho por las llamas de la quema de cañaverales.
NOTA ESCRITA POR FRANCISCO DE ROSA: PRESIDENTE DE META TUCUMAN.